Director del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) desde 2010, Nemesio Pérez está vinculado al Cabildo de Tenerife desde hace más de 20 años, cuando entró a formar parte del área de Medio Ambiente del Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER). Doctor en Geoquímica por la Universidad de La Laguna, el vulcanólogo se formó, entre otros lugares, en la Universidad Autónoma de Madrid, Lousiana State University y la Universidad de Tokyo. Pérez se ha convertido en referente en esta materia, tanto dentro como fuera del Archipiélago.

-Esta misma semana comentaba que la percepción de la población sobre el riesgo volcánico no es la adecuada. ¿No nos lo tomamos en serio?

“La sociedad canaria en su conjunto, administrados y administradores, posee una pobre percepción sobre el riesgo volcánico en las Islas y existen varios indicadores que refrendan esta observación. Por lo tanto, no es la adecuada para afrontar con éxito la ejecución de las diferentes acciones destinadas a reducir el riesgo volcánico. Está claro que la expresión popular “nos acordamos de Santa Barbara cuando truena” es aplicable también a la gestión del riesgo volcánico en Canarias”.

-¿Pero es más una cuestión de la población o de las administraciones públicas competentes?

“En la gestión del riesgo volcánico participamos todos; por lo tanto, es y debe ser una tarea conjunta de geocientíficos, autoridades, especialistas en protección civil y emergencias, planificadores urbanos y territoriales, sociólogos, economistas, psicólogos, educadores, especialistas sanitarios, empresarios, ingenieros, profesionales de la comunicación y la ciudadanía en general que trabajan y viven en zonas volcánicamente activas con riesgo. Es evidente que unos tienen más responsabilidades que otros, pero todos tenemos un papel que jugar para reducir el riesgo volcánico en Canarias. La realidad es que los fenómenos volcanológicos adversos, erupciones o crisis sismovolcánicas, no son tan frecuentes como los fenómenos meteorológicos adversos, y esta clara ventaja que nos proporciona el fenómeno volcánico se convierte en una desventaja para la gestión del riesgo, dado que la población canaria tiende a olvidar que vive sobre volcanes activos”.

-¿El riesgo de una erupción volcánica es más real de lo que pensamos? ¿Hay más posibilidades de esto o de que nos toque la lotería?

“Primero debiéramos diferenciar dos conceptos bien distintos que suelen generar confusión, uno es el riesgo volcánico y el otro es la probabilidad de ocurrir una erupción volcánica, cuya respuesta siempre debe estar suscrita a una ventana temporal concreta. Sin lugar a dudas, Canarias es la única región volcánicamente activa del territorio nacional con riesgo volcánico y esta observación queda refrendada por las 16 erupciones históricas ocurridas en el Archipiélago en los últimos 600 años. También se puede afirmar con rotundidad que el riesgo volcánico en Canarias hoy en día es mayor que hace 50 o 100 años”.

-¿Producto de un incremento de la actividad volcánica en los últimos años?

“No tanto porque los volcanes estén cocinando más en el subsuelo, sino porque nuestras islas poseen un mayor desarrollo poblacional y socioeconómico que hace 50 o 100 años y están expuestas a un peligro natural desde hace millones de años. Volviendo a la pregunta anterior, para que nos toque la lotería tenemos que comprar un número y para que nos toque una erupción volcánica en las Islas tenemos que estar viviendo en Canarias. Por lo tanto, las personas que compren un número de lotería y que vivan en Canarias tienen la posibilidad de vivir ambas experiencias. Otra cosa muy distinta es aplicar el concepto de probabilidad que nos permitiría responder a estas preguntas de manera cuantitativa. Hay herramientas estadísticas para estimar la probabilidad de una erupción en Tenerife en los próximos años. Teniendo en cuenta solo las erupciones históricas en la Isla y asumiendo una estadística de tipo Poisson, la probabilidad de una erupción en Tenerife el próximo año es del 1.2%, en los próximos 10 años del 11% y en los próximos 100 años del 70%. Por lo tanto, es evidente que la probabilidad de ocurrir una erupción en Tenerife es mayor que la probabilidad de que nos toque el gordo de la lotería de Navidad, que es del 0,00001%”.

-¿Veremos un episodio en las Islas a corto o medio plazo?

“Si por corto plazo hablamos de pocos meses, la probabilidad es muy pequeña. Si por medio plazo hablamos de periodos de más de 50 años, es mucho mayor”.

-Muchas veces, al hablar de la probabilidad de una erupción lo primero en lo que pensamos es en el Teide. ¿Nos equivocamos?

“No nos equivocamos, dado que el Teide no sólo es un volcán activo, sino que además es el edificio volcánico más emblemático de Canarias. La probabilidad de una erupción volcánica en el Teide es muy inferior a la probabilidad de un proceso eruptivo en el volcán Cumbre de Abeque, también conocido como Dorsal Noroeste de Tenerife, para una misma ventana temporal”.

-¿Es más probable un terremoto que una erupción?

“Cada día la Red Sísmica Canaria, que opera el Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), detecta terremotos en Tenerife, pero no todos los días ocurren erupciones en la Isla. La mayoría de estos terremotos son suficientemente pequeños y no son percibidos por la población. Por el contrario, si hablamos de terremotos capaces de generar daños, tenemos que dejar claro que la peligrosidad sísmica de Canarias es más baja que la existente en otras regiones de España como Murcia o Andalucía. Sin embargo, algunas erupciones históricas en Canarias han estado acompañadas por terremotos que han ocasionado la pérdida de vidas humanas según las investigaciones realizadas por Carmen Romero, profesora de la ULL y experta sobre el volcanismo histórico de Canarias. Los terremotos que acompañan a las erupciones, aun siendo de magnitud baja, tienen hipocentros muy superficiales que causan sacudidas muy fuertes, aunque estas afecten a un área de extensión limitada. Lamentablemente, el riesgo sísmico asociado a la actividad volcánica en Canarias, ha sido casi ignorado. En septiembre, en la isla volcánica italiana de Ischia, un terremoto de magnitud 4, pero a una profundidad de dos kilómetros causó la pérdida de dos vidas humanas y muchos daños en Casamicciola. Teniendo en cuenta que los terremotos asociados a la erupción histórica de Siete Fuentes-Fasnia-Arafo en 1704-1705 ocasionaron la pérdida de 16 personas, en la actualidad eventos similares podrían tener consecuencias mucho peores”.

-¿Cual es ahora la situación de Canarias, ya que en los últimos tiempos se han registrado muchos enjambres sísmicos y se han vivido situaciones más avanzadas como el volcán submarino de El Hierro o el último episodio de La Palma?

“La sismicidad de Canarias ahora mismo es la normal para un archipiélago volcánicamente activo. Se han registrado enjambres sísmicos como consecuencia de procesos de movimiento de magma en profundidad, como los ocurridos entre el 7 y el 14 de octubre pasado en el volcán Cumbre Vieja, La Palma, pero también se han registrado enjambres sísmicos relacionados con el sistema hidrotermal de los volcanes, como por ejemplo los que están ocurriendo en Tenerife desde junio. En ambos casos, estamos lejos de una actividad sísmica similar a la asociada a la erupción submarina de El Hierro de 2011”.

-¿Contamos en Canarias con una buena red sísmica?

“La Red Sísmica Canaria, que opera el Involcan, para la vigilancia volcánica de Tenerife, cuenta con 15 estaciones sísmicas de banda ancha, de las cuales 13 se localizan en Tenerife y dos en Gran Canaria, dada la necesidad de mejorar la localización de la sismicidad entre Tenerife y Gran Canaria. A pesar de que ya se cuenta con una configuración y una sensibilidad aceptable para la vigilancia volcánica de la Isla, su desarrollo todavía no ha terminado, y durante el próximo año 2018 la Red Sísmica Canaria en Tenerife contará con un total de 21 estaciones de banda ancha para la vigilancia volcánica, así como pondremos en marcha nuevos procedimientos de análisis que contribuirán a fortalecer aún más la capacidad de detección y la calidad científica de los resultados”.

-Haciendo balance anual, ¿Cuál es el mayor avance que ha sumado este año Involcan?

“Son varios, pero podría enumerar algunos. En lo que respecta a la investigación geofísica aplicada a la vigilancia volcánica, hemos contribuido al fortalecimiento de las capacidades existentes en Canarias, dígase recursos humanos y técnicos, a través de la puesta en marcha de la primera fase de la Red Sísmica Canaria con el despliegue de 15 estaciones sísmicas de banda ancha, un sistema de análisis automático para la detección de los eventos sísmicos y un equipo de sismología volcánica liderado por uno de los mejores expertos europeos en sismicidad volcánica, Luca D’Auria, quién fuera responsable de la Sala de Monitorización del Observatorio Vesuviano en Italia. Los resultados registrados por la Red Sísmica Canaria son semanalmente publicados a través del informativo gráfico Guayota-Tenerife, y con una periodicidad mensual a través de boletines mensuales. En lo que respecta a la investigación geoquímica, hemos dado un nuevo impulso al laboratorio de geoquímica de isótopos estables, que ya cuenta con tres espectrómetros de masas de sector magnético y que serán tremendamente beneficiosos para el fortalecimiento las capacidades existentes en Canarias, contribuyendo al avance del conocimiento en diversos temas de interés como la vigilancia volcánica, las aguas subterráneas, la exploración geotérmica, la búsqueda de huellas dactilares de sus productos agroalimentarios de Canarias, las condiciones paleoclimáticas de las Islas, etc”.

-Una de las apuestas de Involcan es intentar normalizar la convivencia entre población y vulcanismo a través de acciones divulgativas. ¿Es fértil esa labor?

“Sí, otro de los logros en el campo de la difusión y la educación es haber logrado rescatar el programa Canarias, una ventana volcánica en el Atlántico, que visita los 88 municipios y que contribuye a una mayor concienciación de la ciudadanía sobre el fenómeno volcánico y la gestión del riesgo. También, contribuimos a una de las directrices marcadas para Tenerife por el presidente del Cabildo, Carlos Alonso – una isla abierta al exterior – a través del desarrollo de diversas actividades del Involcan en más de una decena de países y/o regiones volcánicamente activas (Austria, Cabo Verde, Corea del Sur, Ecuador, EE.UU. de América, Filipinas, Galápagos, Italia, Japón, Madeira, Nicaragua y Singapur), y establecernos como un polo de atracción científica en colaboración con la empresa británica GeoTenerife para que estudiantes universitarios del extranjero lleguen a la Isla para realizar tareas de colaboración científica con el Instituto. Este año unos 50 estudiantes de 20 universidades de Canadá, EE.UU. de América y Reino Unido han tenido la oportunidad de realizar trabajos de colaboración científica. Y por último, haber logrado la implicación de los cabildos de Gran Canaria, La Palma y Tenerife para contribuir al desarrollo de la geotermia de alta entalpía en Canarias, una asignatura pendiente desde hace casi 40 años”.

-¿Las autoridades canarias le dan la importancia que se merece al Involcan o se valora más fuera de las Islas que dentro?

“Personalmente creo que al Involcan se le valora mucho más fuera que dentro de España, aunque tengo que reconocer que la invitación de la Casa Real a mi persona, en calidad de coordinador científico del Instituto para el almuerzo que ofrecieron los reyes de España en honor del presidente de la República de Costa Rica y su señora que tuvo lugar en mayo lo he tomado como un importante respaldo al trabajo realizado durante años por nuestro grupo volcanológico del ITER. Si las autoridades canarias (Gobierno autónomo y cabildos) se concienciaran de la importancia y la necesidad del Involcan para la gestión integral (riesgos y oportunidades) del fenómeno volcánico en Canarias, en la actualidad esta entidad no sólo estaría impulsada por el Cabildo de Tenerife, sino además por el Gobierno de Canarias y el resto de corporaciones insulares. Por lo tanto, se puede no sólo afirmar que las autoridades canarias no le dan la importancia que se merece, sino que además han demostrado su incapacidad, a lo largo de estos años, para materializar decisiones unánimes de las cámaras legislativas de nuestro país que reflejan y justifican claramente la necesidad de la puesta en marcha urgente e inaplazable del Involcan; entre ellas, la del Parlamento en 2006. Aunque en la actualidad se respiran otros aires en algunas administraciones, hasta la fecha, solo las autoridades canarias ligadas al Cabildo de Tenerife han sido las que se han implicado con estas decisiones unánimes poniendo en marcha el Instituto a la espera de que se sumen el resto de instituciones”.

-Usted impulsó la red sísmica de Canarias. ¿Tiene previsto desarrollar alguna infraestructura o proyecto en este sentido?

“Nuestro objetivo es que la Red Sísmica Canaria se convierta en una poderosa herramienta de desarrollo científico y tecnológico que contribuya al fortalecimiento del Involcan como centro de excelencia internacional en el campo de la monitorización volcánica. El equipo del Involcan ya ha desarrollado herramientas de software para el análisis de los datos sísmicos, que en breve se harán públicos para que sean utilizadas por la comunidad científica a nivel internacional, no solo en el campo de la monitorización volcánica. Además, en unos meses se harán públicos en el sitio web más resultados derivados de los recientes avances científicos en este campo”.

-¿Cómo es la relación con el Instituto Geográfico Nacional (IGN)?

“No son las más idóneas dado que desde 2004 el IGN ha sido y es una institución que ha ninguneado los esfuerzos públicos realizados desde Canarias para contribuir a mejorar la gestión del riesgo volcánico en Canarias, llegando incluso a un punto tan desleal como la de incumplir sus compromisos firmados con instituciones canarias en lo que respecta a la gestión del riesgo volcánico en las Islas. Además, el IGN ha sido y es la entidad de la Administración General del Estado que se ha dedicado a poner obstáculos para impedir la materialización de las decisiones unánimes que las cámaras legislativas de este país han tomado y que reflejan claramente la necesidad de la existencia del Involcan”.

-¿A qué se debe tanto enjambre sísmico en los últimos tiempos?

“Todos los enjambres no son expresiones del mismo proceso volcánico. La mayor parte de la actividad sísmica en Canarias no está directamente relacionada con la actividad volcánica, sino que es expresión de la actividad tectónica. En particular la sismicidad que diariamente ocurre entre Tenerife y Gran Canaria está causada por la actividad de una falla sísmicamente activa que se encuentra entre ambas islas. En lo que respecta a la actividad volcánica, hay diferentes mecanismos que pueden causar enjambres sísmicos. El movimiento del magma hacia la superficie causa de la fracturación de las rocas de sus alrededores”.

-¿Qué explicación tiene la activación volcánica detectada en La Palma en octubre?

“Las características sismológicas de los enjambres ocurridos en La Palma hacen suponer que han sido causados por el ascenso de magma en el manto superior debajo de la isla, hasta una profundidad de unos 15 kilómetros. Un mecanismo similar ha sido responsable de la intensa sismicidad ocurrida antes, durante y después de la erupción de El Hierro de 2011. Otro factor es el incremento de la presión en los fluidos (agua y gas) que rellenan los sistemas hidrotermales en el interior de los volcanes. Este incremento baja la resistencia de las rocas y facilita la ocurrencia de terremotos. Este mecanismo es el que ha producido los enjambres sísmicos registrados en Tenerife durante 2017. Después del enjambre sísmico del 2 de octubre del 2016, relacionado con una masiva inyección de miles de toneladas de fluidos en el sistema hidrotermal de Tenerife, la presión del mismo se incrementó de manera macroscópica. Tal y como se ha explicado en los boletines mensuales del Involcan, el incremento de la presión en el sistema hidrotermal del Teide tiene su expresión más directa en el incremento en la emisión difusa de dióxido de carbono (CO2) registrado en el cráter. En febrero de 2017, la emisión difusa de CO2 alcanzó valores de 175 toneladas diarias, el mayor valor registrado durante todo el periodo de estudio desde que en 1997 se comenzaron a realizar las campañas científicas periódicas de observación sobre este parámetro geoquímico en el cráter del Teide. Por otro lado, este incremento ha sido la causa de los enjambres sísmicos que se empezaron a registrar en Tenerife desde el pasado mes de junio. Hasta ahora se ha registrado una docena de enjambres y, en general, un incremento de la sismicidad en Tenerife. Este aumento no está relacionado con la mejora de red sísmica alguna, como así ha sido afirmado por el IGN, sino es un hecho que se puede demostrar utilizando herramientas básicas de sismología”.

-Siendo Canarias la única región volcánicamente activa de España, ¿por qué las sedes de las administraciones que velan por este riesgo no están en las Islas?

“Desde hace mucho tiempo tengo muy claro que todos los recursos humanos y técnicos destinados a la vigilancia volcánica de España deben residir en Canarias, por razones obvias. Que la Administración del Estado cuente con recursos humanos residiendo en la Península y cuya función sea la vigilancia volcánica de Canarias no es de sentido común, y mucho menos que la persona responsable de la vigilancia volcánica en nuestro país resida en Madrid. Esta realidad se debe a una decisión unilateral del Estado en 2004 y a la desidia del entonces Gobierno de Canarias por no modificar este escenario. Cambiar esta situación sólo será posible cuando el Gobierno regional asuma el liderazgo que le corresponde sobre la gestión del riesgo natural”.

QUINCE NUEVAS ESTACIONES SÍSMICAS

“La Red Sísmica Canaria ahora mismo cuenta con 15 estaciones de banda ancha, adquiridas por el proyecto Makavol, co-financiado por el programa de cooperación transnacional de la Unión Europea Madeira-Canarias-Azores (MAC 2007-2013)”, afirmó Nemesio Pérez. “Acabamos de comprar otras 15 estaciones sísmicas de banda ancha gracias al proyecto Volriskmac, que cofinancia el Programa de Cooperación Territorial Interreg V A España-Portugal MAC 2014-2020. Por lo tanto, la Red Sísmica pasará de contar de 15 a 30 estaciones de banda ancha que se desplegarán para el fortalecimiento de la monitorización sísmica con fines de vigilancia volcánica para Tenerife y La Palma, que tendrán 21 y cinco estaciones permanentes, respectivamente; las restantes estaciones se desplegarán en Gran Canaria, La Gomera, El Hierro y Lanzarote”, añadió. “Ahora mismo la red tiene una capacidad para la detección de terremotos alrededor del Teide con magnitud inferiores a uno. Hay que destacar que el desarrollo y la mejora de la capacidad de la Red Sísmica no es solo una cuestión de cantidad, de número de estaciones, sino también de capacidad científica para el análisis de los datos”, aseveró.

 

“La probabilidad de que ocurra una erupción en Tenerife es mayor a que nos toque el Gordo de la lotería”